La vida pixelada de Susan Kare

Cuando trabajas en tu computadora, agregas un emoji a un mensaje o mandas un regalo a tu amigo en Facebook, estás interactuando con el legado de la icónica diseñadora gráfica Susan Kare. Fue una de las pocas mujeres en Apple y se ha convertido en una figura clave en el diseño digital. Lee la fascinante biografía de Susan Kare y descubre cómo sus innovaciones han transformado tu experiencia digital.

El camino hacia Apple: La educación y la experiencia previa en diseño

Susan Kare nació en Ithaca, en el estado de Nueva York, en 1954. Desde que era pequeña, la futura diseñadora mostraba una gran habilidad artística. Así que no fue una gran sorpresa que al terminar sus estudios escolares, fue el arte a lo que decidió dedicarse. Empezó su carrera en Bellas Artes en el Mount Holyoke College y luego continuó sus estudios en la Universidad de Nueva York, especializándose en diseño gráfico.

Aunque la educación académica de aquel entonces era muy formal y convencional, su pasión por explorar nuevos medios y la capacidad para ver más allá de lo evidente le permitieron entrar en el mundo de la tecnología que estaba a punto de experimentar un cambio radical.

El salto al estrellato: Apple y el nacimiento del arte del píxel

A principios de los años 80, el equipo de Apple estaba preparando una revolución tecnológica, la primera Macintosh, que iba a cambiar el rumbo de la tecnología y la forma en que las personas interactuaban con ella. Pero la Mac necesitaba mucho más que la potencia y la capacidad de procesamiento: debería ser accesible, fácil de usar y amigable para el usuario.

En 1982, cuando llegó el momento de contratar a un diseñador, uno de los programadores, Andy Hertzfeld, ya tenía en mente a la candidata perfecta. Andy y Susan se conocían desde los 14 años y habían sido compañeros de clase.

Andy la llamó y le mostró una versión “cruda” de la Mac. Le explicó que la computadora necesitaba gráficos, y le ofreció un trozo de papel milimetrado para que dibujara pequeñas imágenes compuestas por cuadrados. Estos diseños serían luego transmitidos a la pantalla de la computadora. A Susan le pareció un trabajo fascinante y lo aceptó. Incluso tomó una Apple II como pago, aunque jamás la usaba para hacer los gráficos de la Macintosh.

Fuente: Freepik

Para llevar a cabo la compleja tarea de diseñar iconos, Susan Kare adoptó una metodología de trabajo particular que consistía en las siguientes etapas y técnicas:

Etapas:

1. Investigación y planeación: Antes de empezar a diseñar, reflexionaba sobre la funcionalidad y el propósito del icono para tener una idea clara de lo que tenía que representar.
2. Bocetos iniciales: Usando herramientas simples como lápiz de grafito y papel cuadriculado, Kare dibujaba sus ideas. Las cuadrículas le permitían simular la disposición de los píxeles en la pantalla.
3. Diseño simplificado: Creaba diseños sencillos para que pudieran ser fácilmente reconocidos en las pantallas que en aquella época tenían la resolución limitada.
4. Iteración y refinamiento: Tras varias pruebas y revisiones, ajustaba y refinaba los iconos hasta que se sentía satisfecha con cómo se veían.

Técnicas:

• Colaboración y feedback: Trabajaba junto con los otros miembros del equipo y tomaba en cuenta su retroalimentación para perfeccionar sus diseños.
• Inspiración en el arte: Las influencias en la historia del arte, mosaicos y jeroglíficos alimentaban la creatividad de Susan.
• Conexión con la vida diaria: Utilizando los símbolos típicos de la oficina, como lápiz, goma de borrar y pegamento, Kare logró que los iconos fueran intuitivos, familiares para el usuario y resonaran con su experiencia diaria.
• Conexión emocional: Además de ser funcionales, sus diseños tenían un toque humorístico y emocional, lo que los hacía más relevantes y memorables.

Kare también diseñó varias fuentes para la Macintosh: Chicago, New York, Ginebra, Mónaco, El Cairo, San Francisco y Toronto. Originalmente la Mac se emparejaba con una impresora de matriz de puntos Imagewriter, y Kare creó fuentes de mapa de bits que aparecían planas al ser reducidas.

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Más allá de la “manzana”: La carrera después de Apple

La historia de Susan Kare y su influencia en la industria de la tecnología no paró en Apple. Tras dejar la empresa, creó fondos de pantalla, iconos y elementos de diseño para el sistema operativo Windows 3.0 de Microsoft. Uno de sus trabajos más reconocidos para Microsoft fue el diseño del juego Solitario, que se convirtió en la distracción favorita de los empleados de oficina antes de la llegada de internet.

Además, Susan creó una serie de “regalos” virtuales para Facebook, que los usuarios podían comprar y enviar a sus amigos. Pasteles de cumpleaños, flores y corazones: cada regalo virtual era el arte del píxel, lleno de personalidad y color.

En 2015, Susan Kare fue contratada por Pinterest para supervisar el diseño general de la app. En febrero de 2021, Susan Kare se unió al equipo de Niantic Labs. A partir de 2022, lidera una práctica de diseño digital en San Francisco y vende impresiones de su arte limitadas y firmadas.

Conclusión: El legado de Susan Kare

Hasta ahora Susan sigue con su carrera, ofreciendo una gama de servicios, desde el diseño de interfaces hasta la creación de logotipos e íconos. Su estilo continúa marcando la tendencia de cómo interactuamos con la tecnología.

Susan Kare dijo: “Los símbolos sencillos y económicos funcionan mejor y de forma más universal que los cargados de detalles”. Así que si alguna vez te agotas por la complejidad de un proyecto, recuerda las palabras de la mujer que cambió el mundo del diseño gráfico con un simple lápiz y un trozo de papel cuadriculado.

Fuente: Unsplash